jueves, 26 de noviembre de 2015

Y eso es lo que pasa cuando no actuas a tiempo.

Hoy lo siento chicos, pero no estoy inspirada. Hoy me he abierto, mejor dicho, me he desahogado a base de tirones de bandas de cera. Resulta que hoy es mi último día de la semana ya que mañana hare un corto viaje donde el cual me quedare 3 días contados. Ese viaje es muy importante para toda la familia, así que no puedo ir de cualquier manera, es decir, me toca ponerme en manos de una profesional de la estética.
Entre esmaltes y uñas se me salían las lágrimas ya que necesitaba hablar y la más mínima persona que me preguntara algo y yo notase que realmente le interesa pues me abrirá a ella, aunque no la conozca, por el simple hecho de que tengo que hablar con alguien.

¿Y eso he hecho, la verdad es que me ha ido muy bien, hasta que he llegado esta noche a casa y por fin he podido sentarme a revisar mis redes sociales y ver un poquito la tele después de un día tan largo pero claro quién va a entender eso verdad? ¿Mi padre? No. El entiende lo que le da la gana, el no entiende que yo me levante cada puta mañana para estudiar lo que realmente me gusta, desayunar en 5 min, comer a las 11:30 de la mañana, coger el tren e irme y luego cuando vuelva poder descansar un poco.


Él se queja de que yo no hable con nadie de la casa. Pero a ver si se le mete en la cabeza que yo no veo a nadie en todo el día porque están trabajando y que llego a casa tarde y muchas veces me los encuentro a punto de acostarse, déjame que por un rato me relaje yo, ¿no? Porque tu llevas toda la tarde relajándote con tu novia y yo a ti no te digo nada.
Además, no me digas que me relacione con la familia cuando sabes de sobras que yo soy una persona fría y que el que debería volver a estrechar lazos eres tú, ya que te has pasado una temporada pensando en tus cosas con todo esto del divorcio y buscando pareja.
Así que si ya se te ha olvidado como soy y apenas sabes las cosas nuevas que me gustan y que no me gustan es tu problema, apáñatelas.


Suficiente he ido yo detrás para que luego no me hagáis ni puto caso, ni agradezcáis nada.
Espero que el día que me vaya de casa no me eches de menos y estés mejor porque si lo haces, no te preguntes porque me fui y piensa un poco en lo que hiciste. ¿Que no se si lo recuerdas, pero he estado un año yendo al psicólogo y con depresión y tú has hecho algo? No porque no estabas. No me reproches nada ahora porque llegas un poco tarde campeón.


Ahí lo dejo.

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